¿Sabes?

Te voy a componer una melodía de palabras y la voy a convertir en piano para que la escuches como suena a cada segundo en mi corazón.
Te voy a regalar emociones y vamos a dar la nota porque nuestra canción nadie la sabe, es una sinfonía para dos.
Yo te miro y… tú me miras, y hallamos los ojos de alguien que está más allá, soñando con la luz que habita en el otro, imaginándolo resplandeciente, a punto de brillar
Y en ese cuarteto oscuro donde apenas habló el verso
se oyen en silencio un "Te Quiero" y tu voz rompe la soledad.
Ya siento que me habitas, ya siento que me inundas, naufrago en un perfume que desconozco, y duermo, duermo bajo una piel que no es la mía, pero que se parece a tu piel.
Tú, como una nota discordante que me increpa y me delata mientras compongo excusas para hablar de ti.
Toma este piano, toma este teclado de palabras, tómalo todo si quieres, si te apetece, si es buena hora… la banda sonora del alma tiene el color de tus ojos.