Llevo horas sentada aquí, salí a pasear un rato, pero el ruido me cansa.

Sin saber que escribir, necesito teclear un rato, tengo tantas ganas de gritar ahí fuera que soy feliz, pero todos andan ocupados, nadie escucha, todos corren de aquí para allá, como si tuvieran un destino.

Cada vez pasan más rápido los días y apenas me da tiempo a apreciarlos, son pocos los minutos al día que tengo para mí, si es que llego a tener alguno. Pero no me importa, voy a mi ritmo, sin descanso pero sin ataduras...bueno, el trabajo si es una atadura pero mucho tiempo soñé con tener un trabajo así. Gracias.

Anoche soñé que me iba a una playa desierta junto a él, que nos bañábamos en el agua cristalina, que nos mirabamos y los minutos no pasaban, que no terminaba ese día con él, y me gustó. Poder disfrutar del mar, de la arena, de los peces, del sol y de las estrellas, que la luna nos iluminó aquella noche mientras nos abrazabamos, .. y despues sonó el despertador, pero sé que no muy tarde eso se cumplira, que te llevaré de la mano a ese lugar desiertos para ti y para mi.

Es bonito esto de soñar despierta, eres consciente de que no es la realidad, pero tambien encuentras la forma de que puede cumplir, de planearlo (no mucho) y conseguirlo. De separarte de esta mesa y esta silla por unos instantes y estar junto a él. Lo malo es cuando terminas de soñar y lo echas tantisimo de menos. Lo malo..o empecemos a pensar en positivo, y digamos lo bueno de esto es que cuando lo vea lo abrazaré y pensaré en mi sueño y sonreiré sin que el sepa por qué lo hago.

A veces es mejor sonreir y soñar, que vivir despierta y no saber ni lo que quieres.