Hoy simplemente te echo de menos y no sé cómo reaccionar, cómo debo actuar ante tal sentimiento.
Son muchas cosas las que me gustaría contarte o preguntarte, pero no estas aquí para indicarme el camino. Es difícil vivir sin tí, quizás me acostumbré, pero mi sonrisa no es la misma desde que me despedí d ti.
Supongo que tu estas ahí disfrutando de todo esto que estoy viviendo, espero que estes contento con la decisión que hemos tomado, ojalá te sintieras alguna vez orgulloso de mi, pero todo son suposiciones, esperanzas, sueños... no hay nada seguro.
Y es extraña la situación en la que me encuentro. Aprendi a vivir sin ti a base de bocados, pero aun sigo siendo tu niña, la pequeña, la que mas trabajo dio sacarla adelante, pero aquí estoy, llorando por ti sin saber muy bien el por qué de todo, y prefiero no analizarlo más, prefiero asumirlo como hice ya estos 3 años, pero... ver que va a pasar el día más importante de mi vida sin ti a mi lado para darme un beso, me parte el alma, y no quiero imaginar que pasaría si ese dia llorase asi, espero que me ayudes a llevarlo lo mejor posible, yo sé que tu puedes ayudarme y que lo vas a hacer, como hasta ahora.
Eres mi angel de la guarda, mi conexión con el cielo, mi esperanza aquí abajo, y mi lucha para ahí arriba, eres tanto para mi....
Hay dias que pienso que me diste la vida y me la quitaste, pero ahora entiendo más que esos dias, diste la vida por mi, hasta después de irte.
Tan solo quiero darte las gracias, y aunque no pueda darte un abrazo y un beso, sé que tu me quieres tanto como yo a ti.
No hay comentarios:
Publicar un comentario