Hay veces que nos prometemos a nosotros mismos, ser tal cual lo sentimos, dejar las penas y el pasado atrás, sin querer recordar aquello que nos atormentaba o que nos hizo llorar en alguna que otra ocasión.

La vida nos regala muchas cosas, hay personas a las que nos gustan las tormentas y sin embargo a otras las asusta hasta el extremo de esconderse bajo las sábanas, hay quien el sol daña la piel y otros a los que les devuelve la alegría ver esos rayos asomando por la ventana.

Creo que debemos ser positivos y buscar todas esas cosas que nos hacen sentir bien, como ese beso que te despierta por las mañanas, o ese zumo de naranja recien exprimido. Como un baño en el mar a media noche, o un amanecer en la cima de la montaña. El ver a un viejo amigo, abrazarlo y sentir lo mismo que hace años...

No porque hayamos llorado, o porque nos hayan roto el corazón, significa que sea malo, o que no podamos continuar viviendo como antes, es una lección ante la vida que nos enseña a seguir adelante, a pisar con mas fuerza este suelo, esta tierra que nos han regalado sin pedir nada a cambio.

Todos nos hemos reído alguna vez por mitad de la calle sin razón aparente, recordando un bonito momento de nuestras vidas... sígamos riendo!!!